3. Se podría decir que Dios es infinito?

3. Se podría decir que Dios es infinito?

‘Definición incompleta. La pobreza del lenguaje humano es insuficiente para definir lo que está por encima de la lengua de los hombres’.

AK: Dios es infinito en Sus perfecciones, pero el infinito es una abstracción. Decir que Dios es el infinito es  tomar el atributo de una cosa por lo mismo, es definir algo que no se conoce por otro que no es más que la primera.

Comentarios de Miramez:

La Suprema Majestad del Universo es la dignidad, lo impensable y lo incomparable. No es digno de un razonamiento calculado para decir que Dios es infinito. Si no sabemos definir el  infinito por faltar un sentido, aunque abstracto, en la mentalidad de los pueblos e incluso en la mentalidad de los Espíritus desencarnados, él pasa a tener Su existencia y si existe, fue creado. No puede ser, ni tener los mismos valores de su Creador. La deducción formulada surge seguramente debido a la pobreza de la expresión lingüística, nunca para disminuir la personalidad central de todas las cosas. Nada se puede comparar al Arquitecto Universal. De Su vida ardiente y vigorosa salen vidas con la marca de Su amor incomparable. Todos somos hijos del Amor.

Los espíritus encarnados y desencarnados, debemos contentarnos en sentir a Dios en todas las cosas, sin pretender el pleno conocimiento de Su naturaleza magnánima. Sólo Él conoce a Sí mismo.

Nuestra evolución, o el despertar, es gradual en todas las circunstancias. El conocimiento acerca del Señor viene a nosotros con el progreso del alma, que se da a mediante las manos del tiempo. Si la naturaleza no da saltos en cualquier campo de la vida, comencemos  a estudiar a nosotros mismos con grandes ventajas en relación al conocimiento de Dios, y si queremos avanzar, entremos en la escuela del amor, que puede transmitirnos  las primeras lecciones sobre los atributos de la Divinidad.

Somos espíritus inmortales. Operamos en el infinito, cuyo movimiento se asemeja a la inspiración y la espiración que nos sostiene a todos. Utilizamos todos los medios disponibles que ya conocemos para conocer lo desconocido, al igual que la razón, la ciencia, la filosofía y la religión misma, que nos inducen a ello. Sin embargo, sólo el amor más puro es lo que nos hace sentir a nuestro Padre más cerca de nosotros, latiendo en nuestros corazones diciéndonos: la  paz sea con vosotros, traduciendo toda la felicidad en la suavidad y tersura de su calidez espiritual.

Si el infinito pasa a existir y es conocido por las almas con sus variados misterios, no podremos tomarlo como la causa primaria de todas las cosas, pero como un atributo de la Inteligencia Superior. Todas las comparaciones que hacemos de Dios, todos los cargos relevantes que Le atribuimos,   Le disminuye en vista de nuestra pobreza lingüística, porque Él es incomparable.

Dios es infinito en sus perfecciones, en las cualidades inherentes a su personalidad que se irradia en todas las direcciones, lo que sostiene y da vida a todas las dimensiones de la existencia. Él es el único que a todo ve, incluyendo a  todo lo que nuestros sentidos no llegan.

Él es Espíritu y debemos adorarle en espíritu y en Verdad. Él está presente en las claridades del máximo y en la luz mínima. Él  vibra en abastecidas estrellas y canta en los movimientos de los átomos.Mueve todas las constelaciones y armoniza toda la jerarquía cósmica. Sonríe a nosotros a través de las flores, y nos da las manos mediante las manos de nuestros benefactores.

Sabemos que cada definición, en referencia a Dios es incompleta, sin embargo, vamos a transcribir a la definición del Juan el Apóstol: Dios es Amor. Sin embargo, entendamos que el amor es un atributo de la Divinidad.